Aunque llevar la gestión de las redes sociales de una empresa puede ser un trabajo muy emocionante, también puede ser muy complejo y llegar a generar mucho estrés. Y es que son muchas las tareas diarias que deben realizarse y es muy fácil cometer errores que terminen por comprometer la reputación de la marca. Por eso hoy, queremos compartir contigo algunos de los errores más habituales que se suelen cometer en redes sociales y que deberías evitar para que no terminen pasándote factura.

  1. No planificar las acciones

Aunque es de vital importancia tener un plan bien definido de nuestra estrategia en redes sociales, lo cierto es que hay muchas marcas que no lo tienen y que simplemente están por estar. Es fundamental que se lleve a cabo un análisis del público al que nos dirigimos, de la situación del mercado y de nuestra competencia a la hora de crear los contenidos que vamos a publicar, de modo que nos ayude a lograr nuestros objetivos. De lo contrario, tanto nuestras metas como nuestra reputación pueden salir muy perjudicadas.

  1. Intentar abarcar demasiado

Otro error muy habitual es intentar estar en todas las redes sociales incluso cuando nuestro público objetivo ni siquiera está presente en ellas o no contemos con los recursos suficientes para llevar una buena gestión. Es mejor valorar las dos mejores para nuestras estrategia de comunicación y centrarnos en ellas que estar en cinco a medias. Tienes que tener en cuenta que cada una de ellas tiene un objetivo distinto y que el público es diferente.

  1. Usar las redes sociales solo como un canal de publicidad

Los consumidores no quieren escuchar todo el rato que eres el mejor del mercado y lo buenos que son tus productos o servicios. De hecho, los usuarios detestan a las empresas que solamente se dedican a hablar de ellas. Es mejor publicar contenido que sepas que gustará a tus fans, dividiendo los posts en un 20% de publicidad y un 80% de contenido útil y relevante. Además, recuerda que el contenido debe ser variado: textos, imágenes, infografías, vídeos, etc.

  1. Ignorar los comentarios negativos

Incluso las empresas que llevan una buena estrategia en redes sociales reciben críticas o quejas de usuarios que no están contentos, muchas veces trolls que se aburren. Ignorar estos comentarios supone un completo error, ya que acabarás transmitiendo una mala imagen de servicio al cliente. Es importante que respondas a todos los comentarios intentando solucionar los problemas, de modo que el resto de usuarios vean que te preocupas por la satisfacción de tus clientes.

  1. Primar la cantidad de seguidores por encima de la calidad

Muchas marcas se obsesionan con aumentar el número de seguidores en sus redes sociales sin importar si es el público deseado, pero lo cierto es que no vale de nada tener muchos seguidores si no están interesados en nuestra marca y producto. Es mejor esforzarse por llamar la atención de aquellos que puedan estar interesados en nuestros contenidos porque les resultan útiles.

  1. Publicar con demasiada frecuencia

Es importante que no agobies a tus seguidores con demasiadas publicaciones diarias en redes sociales como Facebook, Twitter o Linkedin. Cada red social tiene sus reglas no escritas en cuanto a la frecuencia de publicaciones diarias que los usuarios son capaces de asumir. Respétalas y no te hagas pesado, ya que lejos de gustar, terminarás siendo odiado.